FOTOGRAFIANDO... HADAS...
Muchas veces en nuestra vida, vivimos momentos que por cualquier motivo o razón, olvidamos o quedan retenidos en nuestra memoria, y sin saber concretamente el por qué, recuperamos en un instante. Ese instante no volverá, pero resucitará en nuestra mente, al ver una fotografía, ante determinado olor, ante situaciones parecidas...
Hay otros momentos que es mejor olvidar, pero nos guste o no, siguen en un lugar recóndito de nuestra memoria y acaban por salir, por aflorar de nuevo.
Yo me he propuesto (y sé que tarde o temprano lo haré), olvidar ciertos momentos, ciertas experiencias, vivencias, a ciertas personas o personajillos... Simplemente por el placer de olvidar (que es un placer, ya me daréis la razón), pero no sin antes disfrutar del momento del olvido, de ese instante en el que no recuerdas lo que no quieres, en el que no pasan por tu mente ciertas cosas desagradables hasta para memorias ajenas.
A veces, poner un punto y aparte es lo mejor, pero ojo, no estoy diciendo que vaya ha olvidar ciertas cosas, simplemente, que, de momento, no voy a volver a recordarlas, por que no me da la gana. OK?
El momento de la fotografía fue un buen momento (hay muchos, pero me he acordado de este en particular). Fue en Granada, con la Alhambra de fondo, iluminada, de noche, viendo el antigüo arte del flamenco del Albaicín... me puso el vello de punta mientras duró y me permitió sentir y ver nuevas cosas , o por lo menos, si no lo eran, verlas desde otra perspectiva.
Eso os pido, ver las cosas desde otra perspectiva, aprender de los errores, de las equivocaciones y aprender bien de la experiencia, por que eso enriquecerá nuestra vida y nos ayudará a ser más fuertes y a no golpearnos con la misma piedra. (Esto no quiere decir "desconfiar", quiere decir "APRENDER").
En definitiva, que me encantaría que me contaseis momentos, buenos momentos que vuelvan a vuestra mente, esos pequeños instantes que recordais de pronto y que os hacen SENTIR de nuevo ese instante de felicidad... por que en definitiva, la felicidad es la suma de pequeños instantes de dicha, de alegría, de gozo, de bienestar...
Contadme cosas bonitas, ángeles míos...
Mil besos.
